El informe también destacó la pérdida del poder adquisitivo del Salario Mínimo Vital y Móvil, que fue de $296.832 en marzo. Con ese ingreso, una familia tipo solo pudo costear alimentos básicos durante 20 días, sin cubrir el mes completo. Esta situación evidencia el desfasaje entre ingresos y precios, especialmente en las regiones más alejadas de los grandes centros urbanos.
En paralelo, el mercado cambiario mostró señales de tensión, con un dólar blue que subió 5,77% y un oficial que apenas varió 0,86%, alimentando sospechas de atraso cambiario. Mientras tanto, el ministro de Economía, Luis Caputo, insistió en que no habrá una devaluación brusca y que se busca una "moneda sana" con un proceso de desinflación. Sin embargo, los datos de la CBA y la suba del dólar reflejan que, pese a una macroeconomía ordenada, esa estabilidad aún no se traduce en alivio para los bolsillos.