En los procedimientos, los efectivos que trabajaron bajo la supervisión del jefe de Policía y la fiscala Mariana Rivadeneira, se detuvo a tres uniformado y a un civil. En tanto que el resto de los allanamientos se desarrollaron en las viviendas de los mencionados en la causa y, además de secuestrarles los dispositivos electrónicos, les quitaron sus armas reglamentarias.